Tuesday, May 30, 2006

Ella me besó

No pude sacarme de la cabeza a la Pecosa y me iba enamorando más y más de ella y algo me decía que era correspondida, la pasábamos de lo mejor cuando la Pitbull se iba de viaje, recuerdo que yo iba a su depa y nos poníamos a conversar por largas horas, yo era feliz, claro que todo como amigas pues hasta el momento no había contacto físico de ningún tipo. Una noche íbamos las tres en el VW y la Pitbull se bajó a comprar cigarros, yo estaba sentada detrás de la Pecosa, ella de pronto volteó, me clavo los ojos y me dijo…"ya me jodí" yo me quedé paralizada como siempre, pero entendí que lo que me quizo decir es que estaba sintiendo algo por mí.
Una tarde de domingo de Agosto en Lima era cumpleaños de una de las mejores amigas de la Pecosa y me fui con ellas a festejar, fuimos a un restaurante en Villa, Las 10 Palmeras, lo recuerdo claramente, nos sentamos en nuestra mesa y vinitos van y vienen, la Pitbull se paró y su fue a otra mesa donde se había encontrado con unos conocidos. La Pecosa su amiga un amigo y yo mientras tanto seguíamos brindando cuando en eso la Pecosa me hace un salud y me dice, “…por nuestra amistad aunque a veces disfrazada…” a mí casi se me cae la copa y no me quedó más que sonreir tímidamente, a la amiga no le cuadró la cosa, pero no le quedaba más que pretender que no había escuchado nada. Pasaron las horas y ya estábamos bien movidas, para variar la Pecosa y la Pitbull se pelearon saliendo del restaurante y cuando estábamos manejando a través de Villa, de pronto la Pecosa se baja del carro asadaza yo la seguí sobre pucho, ella se dirigió a la playa, era una tarde muy gris, serían las cuatro de la tarde, yo iba caminando detrás de ella, ella caminaba hacia el mar sin mirar atrás, llegó hasta la orilla y me vió, yo estaba paradita observándola tranquila, para llegar a la orilla habíamos pasado como una pequeña loma de arena por lo que no veíamos el carro, en ese momento éramos ella y yo. La Pecosa loquísima se sacó los zapatos y caminó hacial el agua, yo la seguía observando cuando de pronto corre y se da un chapuzón con ropa y todo y en pleno invierno, yo la miraba sin decir nada, de pronto salió del agua y vino corriendo hacia mi, se me paró al frente muy cerca y mirándome a los ojos, yo la contemplaba, estaba blanquísma con los pelos mojados chorreando agua y cuando menos lo esperé me agarró la cabeza con las dos manos y me estampó un beso que nunca olvidaré, qué tal beso, ese beso finalmente tan esperado me llegó, fue un beso salado con sabor a mar, casi me descalabro. No duró mucho, pero fue suficiente para darle rienda suelta a mis fantasías, me soltó la cabeza, nos separamos y sin decirnos nada caminamos hacia el carro, nos trepamos y nos fuimos con la Pitbull y los dos amigos a su depa, de ahora en adelante todo sería diferente.

Friday, May 26, 2006

ZAPATOS Y ZAPATILLAS


Esa es mi gran debilidad lo confieso, especialmente los de hombre, no hay nada mas gratificante que salir a caminar y de pronto ver un par de zapatos o zapatillas lindos y para mi suerte no sólo en remate sino que hay de mi talla, lamentablemente no puedo dejar de pasar esas ocasiones eso ni hablar.
No se cuando empezó mi fascinación con los zapatos, cuando era niña me gustaban más las zapatillas y soñaba con un par de Adidas o Puma o un par de chimpunes siendo esto un imposible obviamente, en fin sueños que no se hicieron realidad en ese entonces. De chica mis zapatillas favoritas eran unas de basket que sacó Dunlop, también tuve unas North Star que me compraron mis papás en un viaje que hicimos a Arica, más tarde mis botines blancos marca Pony con una raya plateada. De adolescente llegaron las Reebok, tenía el modelo clásico en negras y otras blancas, modelos que ahora me parecen horribles.
Para mi suerte tengo pata grande y me quedan los número 40 de hombre, fiuu. hoy los puse a todos juntos y me di con que tengo 23 pares, nunca antes lo había sabido mucho o poco, no sé, pero les confieso que podría tener el doble si no me contuviera de vez en cuando. Aparte que he decidido tener todas las zapatillas que no pude cuando chica y hasta chimpunes tengo. Hablando de chimpunes recuerdo una vez que la gaseosa Lulú sacó una oferta, por 10 chapas y 20 soles te daban un par de chimpunes, los increíbles chimpunes de Lulú, en el comercial se veían irresistibles, yo y mi hermano menor babeábamos, cuando de pronto se nos presentó la virgen, mi tía Juana nos prometió canjearlos, nosotros estábamos en las nubes, un buen día llega mi tía y de su bolsa tejida de rafia sacó los chimpunes toda orgullosa, yo y mi hermano los vimos, nos miramos a los ojos y no pudimos parar de reírnos, las huevadas eran de puro plástico, una mierda, que estafadores los de Lulú y mi pobre tía para obtenerlos tuvo que hacer largas colas y tomprearse con medio mundo, pobechita, todo para nada porque la verdad daban verguenza. En fin ahora tengo mis chimpunes y todas las zapatillas y zapatos que quiero ya! sino me engrío yo,…quién!

Thursday, May 25, 2006

Mi primera noche en la discoteca gay...

Salí de mi casa como a las 8 de la noche y me puse a caminar, había quedado con la Pecosa y la Pitbull a las 10 p.m. en su depa. Salí temprano con la excusa de que me iba a una fiesta de una compañera de trabajo así que tenía que quemar dos horas, la mentira empezó a ser mi mejor amiga, no tenía otra salida, de esa forma me protegía a mí misma y protegía a mi familia de mi verdad. Llegué al depa y ellas me recibieron con mucha alegría, en esos días traté de poner a dormir mi amor por la Pecosa, no quería interferir con ella y la Pitbull qué me caía bien. Ellas dos me adoptaron y estaban ansiosas de llevarme a lugares gays y de presentarme gente, sobre todo chicas, entre ellas se decían, ¿qué te parece tal o cual para Marea? yo las miraba y no decía nada. Tomamos unos tragos hasta la media noche cuando dijeron ya es buena hora vamos a la disco, ya estábamos algo entonadas con los whiskys que nos habíamos tomado. Nos subimos al VW blanco y manejamos por unos minutos, llegamos a la Ave. Primavera y nos parqueamos en la misma avenida, junto al centro commercial de Chacarilla, todo se veía muerto y ni un alma por las calles. Yo pregunté ¿y dónde está la disco? Paciencia chiquilla dijeron, nos bajamos del carro y caminamos hacia una puerta negra de metal, ellas la tocaron y una cara de hombre de mediana edad abrió una ventanita, ellas saludaron al muchacho y él mirándome de forma sospechosa preguntó, ¿quién es ella? Ellas contestaron es una nueva amiga y viene con nosotras, es de ambiente afirmaron. La puerta se abrió, pagamos la entrada y caminamos unos escalones hacia abajo, la música me hacía palpitar el corazón, clarito recuerdo sonaba una de Erasure, bajamos y aunque no estaba full ya había gente ocupando toda la barra y los lugares que habían para sentarse, habían mas chicos que chicas, P & P me llevaron donde la DJ que era también la dueña de la disco y me presentaron, la Pecosa le traía lo último de la música de Miami, nos fuimos luego a la barra donde también me presentaron al bar tender, un señor en sus 50s de rasgos andinos, todos parecían una linda familia, pedimos un trago y yo mientras tomaba lentamente sorbo a sorbo, miraba como hipnotizada a la gente, los chicos con los chicos y las chicas con las chicas, todos estaban regios y contentos bailando frenéticamente, felices de la vida, cuando llegaba alguien eran gritos, besos y abrazos, de pronto en la barra vi a una pareja chicos besándose apasionadamente, las bocas se comían la una a la otra, le verdad me chocó, esa fue la primera vez que ví dos hombres besarse, claro que disimulé y pensaba dentro de mí que yo era parte de ese mundo, un mundo caleta, distinto. P & P me presentaron unas amigas, todas me chequeaban de pies a cabeza, era la “nueva” y eso es importante pues el mundo lésbico de la Lima que frecuenté era un círculo pequeño y por consiguiente un todas contra todas, el arranche de parejas estaba a la orden del día. Nadie me interesó esa noche, me la pasé más que nada asimilando mi nuevo mundo y potenciales nuevos amigos, me contacté con un par de locas que pasarían a ser unas buenas amigas de aquellos años, aparte ya sabía donde quedaba la disco y me convertí en asidua cliente, no me perdía una noche, estaba recuperando todos esos años que perdí tratando de encontrarme un novio, estaba suelta en plaza y entré al ruedo como un toro lleno de vida y con ganas de acción.

Wednesday, May 24, 2006

Hueveo muy importante

Son las diez de la mañana, entré a trabajar a las 8:30 y todavía no he hecho nada de lo que vine a hacer, trabajar. Lo primero que hago cuando llego a la chamba es el café, Peets bien fuerte, luego una conversación breve con mis compañeras, voy a mi oficina, me siento y comienza mi surfeo en el Internet. Primero a chequear como están las olas vía webcam, veo las de aquí y también las de Lima, continuo y visito adonde.com donde salen todos los medios de comunicación peruanos, leo algunos artículos de vez en cuando y más que nada chequeo los titulares para ver si hubo maremoto, terremoto o que otra idiotez hizo el papa de Humala,…sigue el hueveo ahora chequeo mi email, borro el junk mail y contesto un par, cierro el email y me dirijo a perublogs y me pongo a bucear un buen rato, así me dan las diez y aunque llegué a las 8:30, comienzo mismo gerente a las 10, qué bien carajo, me lo merezco, me pregunto si trabajaba más cuando no había Internet, y eso que me falta hacer mi llamada de larga distancia a mi mamita a ver que ha cocinado y que se me agua la boca, tengo que tomar mi hora de almuerzo y cada vez que voy al baño me hago cinco minutos de ejercicio entre cintura y brazos, salgo del baño respirando hondo, pensaran que me la corrí, y eso no es todo a las 5 en puntito o unos minutitos antes me largo, como no pagan sobretiempo, ni hablar no me quedo ni un minuto más, me pregunto si todos huevean como yo, espero que sí, lo cierto es que mi trabajo lo domino y en dos horas puedo hacer el trabajo de un día, …excusas? siempre se me sale el sentimiento de culpa, maldita herencia del catolicismo que no me deja del todo, en fin bendito sea el Internet y que tengan un lindo día de hueveo…trabajo.

Tuesday, May 23, 2006

Finalmente alguien como yo

Dos días se me hicieron dos años, no podía dejar de pensar en ella y en lo que le iba a decir, claro que solo le diría que me gustaban las mujeres y no que me moría por ella, eso lo dejaría para más tarde aparte yo no sabía si ella estaba en una relación. Pasaron los dos días y la llamé, tuvimos una conversación breve por teléfono y quedé en ir a su casa por la tarde, de mi casa a la suya habían ocho cuadras así que llegué puntualita y con el corazón a mil, toqué el timbre y ella preciosa me abrió la puerta, entré tímidamente, dentro del depa estaba una señora a la que me presentó como su mamá y otra chica que me presentó como su amiga, las dos muy amigables pero mirándome de arriba abajo claro está. La conversación era algo incómoda cuando de pronto a la Pecosa, así la llamaré de ahora en adelante se le ocurrió ir a comprar, y me dijo vamos a la tienda, acompáñame. Salimos del depa y caminamos a un parque que estaba cerquita, y entonces me preguntó, ¿qué me quieres contar?, yo pasé saliba y me quedé en blanco, ella sonrió tomó mi mano y me dijo, yo sé lo que te pasa, a tí te gustan las mujeres, yo abrí los ojos y le pregunté, ¿cómo sabes? Ella contestó, no en vano te llevo unos años, me tomó de la mano y me dijo no te preocupes con una gran sonrisa dibujada, yo le confesé que no conocía a nadie así aparte de a ella, entonces me dijo, te vamos a presentar a todo el mundo, cuando dijo “vamos” yo me di cuenta que la amiga del depa era su pareja, cosa que ella confirmó y a la que llamaré la Pitbull de ahora en adelante. Finalmente el simple hecho de haber compartido con alguien ese gran secreto me había liberado, me hizo sentir literalmente como si me hubieran quitado un mundo de encima, sentía que flotaba de alegría, fue una sensación increíble. A través de la Pecosa y la Pitbull empecé a frecuentar a la gente de ambiente y los lugares gay de Lima en los años 89, 90, 91, 92. Me hice de un lindo grupo de amigos, chicos y chicas gay algunos en el closet para sus familias como yo, pero fuera de ese círculo decididos a ser fieles a nosotros mismos y vivir lo nuestro. De ahora en adelante contaré mis anécdotas en el mundo gay, mis idas a las discos, relaciones amorosas y mil historias de todo tipo, fueron unos años inolvidables en los que viví y probé casi de todo.

Sunday, May 21, 2006

El Querer Ser Como las Demas V

Entré al turno de madrugada y cómo de costumbre lo primero que hice fue ir a ver el roll de los tripulantes y allí estaba su nombre, vuelo Lima-Miami-Lima con salida a las diez de la mañana. Según mis cálculos los tripulantes tenían que cruzar por mi oficina a las 8:30 de la mañana, pensé qué esa era mi oportunidad. Pasé la mañana inquieta y pensando una y mil veces en qué le iba a decir. Pasaron las horas cuando de pronto empiezan a pasar los tripulantes, me fui al baño que quedaba a unos metros de la oficina y mi plan era interceptarla en el amplio pasillo del aeropuerto, calculé mi tiempo y salí del baño, ella acababa de pasar entonces decidí alcanzarla, caminé rápido y la tomé suavemente del brazo, ella sorprendida volteó y me dijo muy suelta de huesos "Hola," yo correspondí algo nerviosita y fui de frente al grano porque no había tiempo, ella tenía que llegar al avión y yo tenía que regresar al counter, entonces le dije..."tengo algo que decirte," ..."Sí dime"..."aquí no puedo tenemos que vernos en otro lugar"...ella me miró algo extrañada..., le pregunté, ¿dónde vives? me respondió, y daba la casualidad que vivía a unas ocho cuadras de mi casa, ¿sería el destino? mi corazón saltó, me dió su teléfono y me dijo, "regreso de Miami pasado mañana, llámame"...yo le dije "sí claro" y nos despedimos.
Me quedé temblando...finalmente iba a tener contacto con el mundo gay de Lima y con ella que ya había robado mi corazón.

Friday, May 19, 2006

Querer ser como las demás IV

El trabajo en el aeropuerto era huevero y entretenido, además rodeada de mamacitas no tenía de qué quejarme, a veces me sentía como un lobo entre ovejas. Como en todos los trabajos los chismes corren como pólvora y yo ya desde chica había escuchado hablar a mi papá de una parejita de lesbianas. Así que ni bien entré a trabajar me dediqué a buscarlas, tenía finalmente que encontrar gente como yo. Las dos eran flight hostess, y azolapadamente les puse el ojo, una era seria y huevo sin sal, en cambio la otra era una mujer llena de vida, amable y a mi parecer guapísima con una melena al viento y una sonrisa muy linda, no pasó ni un mes y yo ya tenía un crush en ella. Tenía que pensar rápido en un encuentro casual y presentarme, así lo hice, recibí un vuelo en el que ella llegaba, bajó las escaleras risueña y linda y yo la miré a los ojos y me presenté, fue un encuentro breve pero había dado el primer paso, fiuu.
Así poco a poco me la encontraba de vez en cuando y nos íbamos familiarizando la una con la otra, yo siempre le clavaba mis ojazos y trataba de hacerla sentir lo que yo sentía, pero los encuentros eran esporádicos y la cosa era difícil pues la oficina de ella estaba al otro lado de la rampa y sólo podía verla cuando volaba y si para mi suerte yo estaba de turno y me tocaba ir a la rampa. Pasaron los meses hasta que ya no pude más y decidí decirle que me gustaban las mujeres, ¿cómo lo haría? no sabía pero ya no podía más, tenía 22 años y estaba muriéndome, necesitaba conocer gente como yo.

Thursday, May 18, 2006

La Naturaleza es el único amigo que nunca te fallará

Cien por ciento verdad, en mis momentos más difíciles he corrido a los brazos de ella y siempre me ha reconfortado y dado esperanza.
Hoy recordé esa frase pues a la hora de almuerzo me fui a tirar a un jardín maravilloso que hay cerca de mi trabajo y me sentí feliz viendo los árboles desde abajo, escuchando a los pájaros, viendo las nubes pasar, qué suerte la mía.
No hay cómo sumergirse en ella y dejarse llevar, no pensar en nada simplemente escuchar, sentir, ser. Los amigos vienen y van, ella siempre se queda, ella siempre está.

Wednesday, May 17, 2006

Fotos de Yosemite


Half Dome o Media Cúpula


Cataratas Yosemite


Un pequeño arco iris en la base de las cataratas Velo de Novia


Cataratas Velo de Novia


Catarata Illilouette


Los sequoias gigantes.

Que saludable es tirarse la pera...




Qué rico, ayer llamé enferma a mi trabajo desde un hotel a cuatro horas de distancia de mi oficina, ja, ja. No hay nada como hacerse el enfermo y disfrutar de un día haciendo lo que uno quiere, ya sea quedarse todo el día en la cama tirando o marmoteando o viendo televisión o leyendo o talvez salir a la calle a tomar un café o ir a la playa cuando no hay nadie, etc. Lo recomiendo a todo el mundo "tírense la pera" por lo menos una vez cada dos meses, nos lo merecemos, después de estar clavado en la oficina de 8 a 5 lo mínimo es un día único y exclusivamente para uno mismo, ese tiempo no tiene precio. Lo tenía todo planeado, cogí carro y me fui manejando hasta Yosemite, un parque nacional en California con vistas espectaculares, miren algunas fotos. No hay como salir de la rutina y ver cosas nuevas, así se alimenta el espíritu, esto lo aprendí de mi padre quien no faltaba al trabajo así estuviera enfermo y al final para qué, no vale la pena uno está primero así que amigos a enfermarse.

Friday, May 12, 2006

Qoyllur-Rity IV

¿Alguién sabe cuando se celebra la fiesta/peregrinaje al santuario dell Sr. de Qoyllur-Rity este año? llamé a mi amiga la gringa al Cuzco pero no está en su casa, seguro se ha ido a comprar su helado de coca, ja,ja. Como estoy escribiendo sobre mis experiencias en mis tres peregrinaciones al Sr. de Qoyllur-Rity me pregunto si se realizará en Mayo o Junio de este año.
La primera vez que fui en 1992 se realizó a fines de Mayo, las otras dos en Junio. Si alguien lo sabe me avisan sí. Gracias.
Queriendo encontrar esta fecha en el Internet, he leído varios artículos en los que dice que esta celebración se lleva a cabo en el mismo nevado Ausangate cosa que no es cierta, el Apu Ausangate está lejitos del santuario del Sr. de Qoyllur-Rity, si uno trepa del valle donde está el santuario hacia la nieve o hacia arriba en cualquier dirección podrá ver el Apu Ausangate en la distancia.

Thursday, May 11, 2006

Qoyllur-Rity - III

Esta foto es del primer viaje que hice a Qoyllur-Rity en 1992, mi última peregrinación fue en el 2003, me impresionó cómo ha aumentado la cantidad de peregrinos, de negocios, de turistas, en fin es una explosión, así que mientras más rápido vayan mejor.

Esta señal la encontré en el 2003, así mismo han hecho escaleras en la primera subida, la más empinada de toda la caminata.

Esta foto es de 1993.

Posteriormente compartiré más fotos.

Wednesday, May 10, 2006

Qoyllur-Rity II





De Mawayani nos esperaba el verdadero peregrinaje, la caminata hasta el santuario del Sr. de Qoyllur-Rity, ubicado en las faldas del Nevado Sinakara. La gringa y yo éramos inseparables, ella tenía más experiencia en las alturas y sabía qué esperar aparte que la acompañaba su ayudín, osea su cocaína que le daba fuerzas en esos momentos en los que ya no se puede más. Para mí el peregrinaje era algo serio y no pensaba meterme nada quería sufrirlo en su totalidad. Comenzamos a subir poco a poco serían las nueve de la mañana, cargábamos lo mínimo, agua, cámara fotográfica, hojas de coca y algunos snacks. Rapidito yo sentí la pegada de la altura, cada 20 pasos tenía que parar y esperar a mi corazoncito que se tranquilizara para poder continuar, así llegamos a la primera cruz. Durante el camino se ven 9 cruces y hay que parar en cada una de ellas y hacer una pequeña oración u ofrenda. El camino es no muy ancho pero es cómodo y va acompañando a un río formado por aguas de deshielo, al principio se camina junto a un abismo y luego se llega a un valle no muy ancho, todo en subida gradual, la primera subida es la más difícil. Por gran parte de la caminata cuando uno voltea hacia atrás puede ver el increíble Ausangate, cuando esta caminata se hace de noche la vista del Ausangate es espectacular.
Cada paso que daba era una lucha que se hacía más difícil cuanto más tiempo transcurría, los lugareños por el contrario nos pasaban trotando unos con niños en la espalda, otros con leña, mercancía, etc. qué bruto.
Poco a poco me fuí debilitando y me parecía que nunca íbamos a llegar al santuario, la gringa me decía trépate a una mula, pero yo terca no quería, era un peregrinaje y nada de trampitas. Casi llegando con dolor de estómago por las hojas de coca, la fatiga y la altura, de pronto escucho a un caballo relincharme en la oreja, la cosa fue tan inesperada e intensa que dí un salto como si me hubieran metido un balazo y me puse a llorar, ya no podía ni con mi alma, recuerdo a la gringa cagándose de risa al verme diciéndome pobrecita.
Finalmente después de una lomita y cinco horas de caminata finalmente divisamos el lugar, era un espectáculo, esa quebrada desolada rodeada de nevados con la iglesia a la derecha, mi llanto fué incontenible y después de reponerme tuve que hacer lo primero que hago cuando llego a Qoyllur-rity, ir corriendo a las letrinas pues me cago, no se si es la altura, las hojas de coca, el frío, la emoción o un efecto por el cual mi cuerpo se tiene que limpiar antes de acampar, no sé pero las tres veces que he ido a Qoyllur-Rity me ha pasado lo mismo.

Monday, May 08, 2006

Qoyllur-Rity - I


La primera vez que escuché hablar de Qoyllur-Rity fue a través de una gringa que conocí en el aeropuerto y con la que me hice amiga para siempre. Ella se instaló en Cuzco donde vive por muchos años y había tenido la suerte de haber ido a Qoyllur-Rity por primera vez en el 1991. Cuando trató de explicarme su experiencia yo supe en mi corazón que el próximo año tenía que ir a ese peregrinaje sea como sea. El año se pasó volando y llegó el día de mi partida al Cuzco con el fin de ir a la celebración del Sr. de Qoyllur-Rity. La gringa me advirtió,...hace un frío de mierda así que tienes que venir preparada para eso, aparte la altura es brutal, casi 5,000 msm. trae un buen sleeping bag, yo te presto colchón y compartiremos mi carpa. Yo saqué de mi casa lo que pensaba me podía abrigar, siendo limeña no tenía la menor idea del frío que me esperaba, mi hermano mayor me prestó una casaca verde tipo militar algo acolchada y de material tipo cortaviento, tenía mis botas de segunda compradas en la cachina, me quedaban un poquito grandes pero con la cantidad de medias que me iba a poner para el frío no habría problema alguno, una amiga me prestó medias de lana que su mamá le tejió y una bolsa de dormir que parecía más para acampar en la playa que en las faldas del nevado Sinakara, pero entusiasmo me sobraba, había esperado un año por esto, coordiné mis vacaciones y me fui diez días a Cuzco.
La gringa se encargó de todo, alquiló la combi que compartíamos en total unas siete personas, la gringa, yo, el shamán por supuesto, un par de cuzqueñas que ayudarían con la cocina, dos europeas, una manquita que tocaba la trompeta y la otra una señora en sus intentos de convertirse en shamán. Nos recogieron a las tres de la madrugada, el camino hasta el pequeño pueblo de Mahuayani dura sus cuatro horas mínimo y teníamos que llegar lo más temprano para luego de Mahuayani comenzar el peregrinaje al santuario del Señor de Qoyllur-rity, ocho kilómetros cuesta arriba. Yo no sabía en lo que me había metido, pero algo más fuerte que yo me llevaba y yo me dejaba arrastrar, feliz de la vida.
Llegó la combi, blanca con llantas de camión, salimos con nuestro equipaje, el chofer lo amarró bien al techo y partimos en la noche fría y estrellada de Mayo. Yo estaba despiertísima, mientras el resto iba cabeceando yo contemplaba a través de la ventana las lucecitas amarillas de los pueblos y me preguntaba por dónde estaríamos, a la par contemplaba el cielo maravilloso del Cuzco, ese cielo que los limeños no tenemos, tupidito de estrellas y con estrellas fugaces que caen una y otra vez inesperadamente, mi corazón saltaba feliz mientras la combi seguía y seguía, de pronto paramos en una garita de control se hizo la revisión de documentos y comenzó el camino de tierra, subíamos por un interminable serpentín de polvo y las luces de los pueblos poco a poco se alejaban para luego verse diminutas muy abajo.
Toda la gente en la combi dormía y yo mientras tanto seguía hipnotizada mirando por la ventana sedienta de no se qué, iba contando estrellas fugaces cuando poco a poco la luz del cielo empezó a cambiar de color, estaba amaneciendo, que espectáculo ese color azul lápiz lázuli cubría el cielo sobre los Andes, y nosotros seguíamos en ese interminable zigzagueo cruzando pequeños poblados con casitas hechas de barro con techos de ichu algunas y otras con techos de planchas de metal, de las casitas salía humo por el techo. Finalmente después de varias horas de camino paramos en Tinqui para tomar algo caliente, usar el baño, un hueco en el suelo y punto, y seguir rumbo a Mahuayani. Tinqui era chiquitito, había una plaza principal rodeada de pequeños negocios, nos tomamos un cafecito violento y seguimos adelante. El motor de la combi era lo único que escuchaba, ese eterno acelera y desacelera en las curvas. Partimos hacia Qoyllur-riti antes que la mayoría de los peregrinos por lo que casi no estubimos en medio de tráfico cosa que me pasó en mi tercera visita al campo sagrado. Finalmente llegamos a Mahuayani, todos maltrechos del viaje nos bajamos de la combi, subimos el equipaje en mulas que irían por delante y empezamos la subida hacia el santuario.
Imagen: Mahuayani, Cuzco

 
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